sábado, 1 de diciembre de 2012

Capítulo 6 ~ Segunda Temporada



Mi cuerpo se bloqueo, no me podía mover. Mi mirada estaba fija en sus ojos, y luego, en su sonrisa. Iba a decir algo, pero me interrumpió.

-¿Es evidente no? – Dijo, entrando en casa – Demostrarte que me importas.

-Justin... – cerré la puerta detrás mío, y le mire – No tienes nada que demostrarme.

-Me acabas de decir que quieres hablar las cosas cara a cara – dijo, señalando su móvil – Bien, vamos a ello.

Se dirigió al salón, donde estaba haciendo yo los deberes. Al ver el ordenador, con las fotos sonrió y me miro.

-Lo pasamos bien – dijo, sentándose - ¿No crees?

Asentí con la cabeza, y me senté encima la mesa, en frente suyo.

-Bien – dije con tono seco - ¿Qué?

-Vaya, que maja eres… - se peino el pelo con la mano, y me volvió a mirar. - ¿Qué te pasa conmigo?

Empecé a reír, irónicamente.

-Vamos a ver… ¿Como tienes el valor, de venir a mi casa, A PREGUNTARME qué “que me pasa contigo” como si no hubieras hecho nada? – Imite su gesto de peinarme el pelo, con una sonrisa irónica - ¿Pero tú qué tipo retraso sufres tío?

-No entiendes nada…

-¡NO! – Grite, levantándome – Aquí el que no entiende nada eres tú. Tú no tienes ni la menor idea de cuanto sufrí después de tus jodidas palabras. No tienes ni idea de lo duro que fue para mí, estar en Nueva York. No tienes idea de nada. Y me lo demuestras, viniendo aquí, con aires de superioridad, creyendo que caeré a tus pies. Yo no soy así, Justin.

-¿Y A CASO TU TIENES IDEA DE LO QUE SIENTO YO? – Gritó, dejándome a mi sorprendía - ¿Tienes tu idea de por qué rompí contigo?

-Querías estar con Blair. – Contesté – tampoco cuesta tanto de entender. Crees que lo tienes todo. Eres el típico niñato que tiene a miles de chicas detrás, y las utiliza como le da la gana.

-Deja de decir eso, porque es mentira. – Susurro – Nunca me he arrastrado por una chica, y
ahora lo estoy haciendo por ti. ¿Sabes las noches que he pasado en vela, maldiciendo mi existencia por haberte dejado marchar? ¿Lo sabes?

No le pude responder. Estaba diciendo la verdad, lo notaba.

Justin se acerco a mí, y me cogió las dos manos.

-Te aseguro que me arrepiento, ______ - dijo mirándome a los ojos – Si supieras las razones, lo entenderías. Pero no te las puedo decir.

-Si de verdad me quieres, lo harás. – dije rápidamente.

-Confía en mí, por favor. – Me acaricio la mejilla – Sabes que lo daría todo por ti.

- Vale. Confío en ti. ¿Y? – Me solté de él – Tu ahora estas con Blair, y yo…

-Yo no estoy con Blair – me espetó, con una sonrisa - ¿Tu estas con Josh?

-¿Y Por qué te besa? No sé, quizás sean alucinaciones mías. ¿No es eso lo que hacen las parejas?

Justin se rio, y volvió a cogerme la mano.

-¿No te ha besado ese tal Josh hoy? ¿Es tu pareja? ¿No verdad? Ya te he dicho que confiaras en mi…– Me sonrió – y ahora, contéstame ¿te gusta Josh?

Noté como me subían los colores.

-N-no lo sé…

Vi como la expresión de Justin cambiaba, y se volvía más seria.

-Mierda, tengo competencia – dijo en voz baja – Bueno, da igual. Sé que te gusto yo.

No pude evitar reír ante el comentario.

-Echaba de menos tu risa – se acerco más a mi – Mejor dicho, te echaba de menos a ti.

-No lo parece – susurre.

-¿Te parece poco toda esta declaración?

Me cogió por la cintura, y se agacho un poco para que quedáramos frente a frente.

-¿Qué declaración? – dije, sonrojada.

-Esta – Se acerco a milímetros de mis labios, y rozándolos, dijo – Te quiero.

Y lentamente, me cogió de la cara. Haciendo que nos fundiéramos en un beso dulce y cargado de sentimientos. Cuando separamos nuestros labios, apoyo su frente contra la mía.

-Eres mi vida, ______ - me sonrió – Me dan igual los demás, cueste lo que cueste, te recuperaré.

-No tienes fe – dije riendo, a la vez que le empujaba.

-Ya, ¿y Por eso me devuelves el beso? – dijo, guiñándome el ojo.

-Creído. – Me reí – Te lo devuelvo para que no te sientas mal.

-Ya… - me cogió de la cintura, cuando me sonó el teléfono - ¿Tienes que cogerlo?

Me deshice de él, y cogí mi blackberry. Era Josh. No lo cogí, delante de Justin no. Después lo llamaría.

Pase la tarde con Justin. Me ayudo con el trabajo de Filosofía, y luego se quedo conmigo para preparar las cosas para la cena. Josh, me llamo durante toda la tarde, tuve que poner el teléfono en silencio, para que no interrumpiera cada dos por tres.

Quería estar con Justin, sin nadie que molestara.

A las 7:45, antes de que llegara mi padre se fue.

-Mañana nos vemos – dijo, apoyado en el marco de la puerta.

-Hasta mañana – iba a cerrar la puerta, pero él me lo impidió.

-¿No me vas a dar nada? – Dijo pícaro - ¡Vamos! Sé que lo deseas.

-Eres un creído de mierda, en serio – me reí – cierra los ojos.

Justin los cerro, y se acerco para darme un beso. Cuando estuvo lo suficientemente cerca, le cerré la puerta en las narices. Saque el teléfono, y le envié un whatsapp con el muñequito que daba un beso. Me senté en la entrada, pensando en él, en su sonrisa, en su mirada, en todo. Volvía a... ¿ser feliz? Eso parecía. Justin me contesto con un “mañana no te escapas”

Inmediatamente, sonreí. No sé que planeaba. Él aun estaba con Blair, pero me dijo que confiara. Que volveríamos a estar juntos. Yo tenía que hablar con Josh, y no sabía que decirle. Tenía un lio en la cabeza. Pero no podía parar de sonreír.

No me acordaba que, de aquí dos días, tenia puente. Viernes, sábado, domingo y lunes, los pasaría en casa. Y mi madre, me había propuesto que los pasara con ella. Eso significaba, volver a ser vecina de Justin

0 comentarios:

Publicar un comentario