sábado, 1 de diciembre de 2012

Capítulos 15 y 16



Narras tú.

Volvimos de la playa a las 18:00. Pero no llegamos a casa hasta las 20:00. Nos quedamos en una heladería, hablando. Fue uno de los días más divertidos que había llegado a pasar. Hablé durante mucho rato con Jasmine, y pude saber más de ella.
Con Chaz paso lo mismo. La tarde paso rapidísima, gracias a Ryan y sus chistes malos.

-¿Os quedáis a dormir? – preguntó Blair, al llegar a casa.

-Yo no puedo, mañana tengo que madrugar. – suspiro Jasmine.

-Yo tampoco puedo – dijo Chaz, cogiendo su mochila – ya conocéis a mi madre…

-¿Y vosotros? – dijo Blair, mirando a los que aun no habían hablado.

-Sin mí no sobrevivís aquí, ya lo sabes. – contestó Ryan.

-Si este se queda, yo también – dijo María, señalando a Ryan. Este le dedico una mueca.

Blair miró a Justin esperando una respuesta, y este me miro a mí.

-¿Te quedas? – me preguntó.

Asentí con la cabeza, y le sonreí.

Chaz y Jasmine, ya se habían ido. Solo quedamos Ryan, Maria, Blair, Justin y yo. Decidimos cenar. Descubrí que a María se le daba bien la cocina, ya que fue ella quien preparo la cena. Después de cenar, nos quedamos en el salón. Blair hablaba con María sobre marcas de ropa, Ryan estaba entretenido mirando un documental que daban en la televisión sobre los monos, y yo estaba sentada en el sofá junto a Justin. Estaba apoyada en su hombro, y me entraba el sueño. Entonces recordé, que a la mañana siguiente iría a un casting, junto a Blair. Tenía que contárselo. Quité mi cabeza de su hombro y me levanté. Le hice un gesto para que me siguiera. Salimos hacia fuera, donde esta misma mañana habíamos hablado, y donde Blair nos había interrumpido.

-¿Qué pasa? – preguntó, cerrando la puerta.

-Mañana me voy a un casting con Blair – le contesté, esperando que me echara bronca.

-¿Con Blair? – Me miro, incrédulo - ¿Estás segura de querer ir?

Se sentó en las escaleras, y dio dos palmadas en el escalón para que yo hiciera lo mismo.

-Des de pequeña, siempre he querido ser actriz o modelo – dije, mirando al frente – Es el típico sueño de niña pequeña, lo sé. Pero es algo que quiero, y si se me presenta la oportunidad, no la voy a dejar escapar.

-No es eso. – Se levanto, y se arrodillo delante de mí - sabes que yo te apoyare en lo que sea. Solo que… No me gusta Blair, y no quiero que te haga nada.

-Y te agradezco que te preocupes por mi – le acaricie la cara – Pero no creo que sea tan mala, solo lo quiere aparentar.

-De acuerdo - se levantó - ¿Entonces no le importara que yo también vaya, no?

No pude evitar reír. Me levante para abrazarle. Justin se preocupaba demasiado por mí. Pero no tenía razones. Quizás Blair, al principio se comportara mal. Pero ahora, era diferente.

-Como quieras – le susurré al oído - ¿Entramos?

Entramos a dentro, y vimos que Ryan se había dormido en el suelo. María no estaba y Blair tampoco.

-A lo mejor están arriba, ahora vuelvo – dije, dándole un beso.

Subí las escaleras, y piqué en la puerta de la habitación de Blair. La abrí. Solo estaba María, dormida. Cerré la puerta lentamente, para no despertarla. Baje a bajo, donde estaba Ryan. Justin no estaba, ni tampoco Blair. Me estire en el sofá, y me quede dormida.

Narra Justin.

Me senté una silla que había en frente de la cocina, esperando a que _________ bajara. Estaba confuso. Ella me preocupaba mucho. Era demasiado buena persona, y se creía todo lo que le decían. Estaba seguro de que Blair planeaba algo, y precisamente no era algo bueno. Escuché un ruido que provenía de la cocina, y fui a ver que era. Blair estaba buscando algo en la nevera.

Me acerqué sin que me escuchara y le cerré la puerta de la nevera, de golpe.

-¿Qué tramas? – le espeté, sin alzar mucho la voz.

-¿Qué dices? – dijo, apartándose de mí.

-Sabes a lo que me refiero. – Le agarre la mano – Mira Blair, te voy a ser sincero.
Quiero a _______ por encima de todo. La perdí una vez, y no consentiré que haya una segunda.

-¿A qué viene este discursito ahora? – dijo, con ironía.

-Es muy fácil. – Le sonreí – Haces daño a _______, y me ocuparé personalmente de ti.

Blair empezó a reír. Se sentó encima de la encimera, y me miro.

-¿Esto es una amenaza, Justin? – Dijo, arqueando una ceja - ¿Te crees que me das miedo?

-No pretendo darte miedo. Solo te aviso.

-Es patético. No le voy a hacer nada a _______ - bajo de la encimera, y se acerco a mi

– Me comporté mal, lo sé. Y te pido perdón.

No contesté. No me creía sus palabras. Se acerco aun más a mí, y me cogió las manos.

-¿Qué nos ha pasado Justin? – Preguntó, mirándome fijamente - ¿Qué es lo que hice mal?

-No me preguntes, lo que ya sabes – dije, soltándome de ella.

-¿A caso no podemos ser amigos? – Preguntó, cogiéndome del codo.

Me solté de ella y me fui al salón, donde estaba Ryan. Vi que ________, estaba dormida.

-Súbela al cuarto de invitados – Blair estaba detrás mío, apoyada en la puerta –Es la segunda puerta, a la derecha.

Cogí a ________ en brazos y la subí arriba. Abrí la puerta como pude, y la deje en la cama. Cogí una sabana, y la tape. Iba a salir, cuando ________ habló.

-Justin…

Susurró mi nombre, y me quede paralizado. ¿Estaba hablando en sueños? La observe a oscuras. Incluso a poca luz, se podía apreciar su belleza.

-Justin, quédate…

Vi como abrió los ojos, y me miraba fijamente. Cerré la puerta que estaba entreabierta detrás de mí, y me acerqué a ella. Me estire a su lado, y ella se acurruco en mi pecho. Sería la segunda vez que dormiría con ella, y no me desagradaba la idea.
La abrace delicadamente, para evitar que se desvelara más. Amaba a ________, con locura. Y no quería que nadie estropeara lo nuestro. Sin poder evitarlo, me dormí.



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Capitulo 16.

Narras tú.

No había mejor manera de despertar, que no fuese a su lado. Justin dormía profundamente. Incluso dormido, era perfecto.

Me levante, y baje hacia el salón. Los demás estaban desayudando al escuchar pasos, se giraron para ver quién era.

-Buenos días – susurré.

-Buenos días – dijeron Blair y María, a la vez.

-¿Habéis dormido juntooooooooooooooos? - dijo Ryan, irónico - ¿A que habéis jugado? ¿Al parchís?

-Ryan, háztelo mirar – dijo Justin, apareciendo detrás de mí – Buenos días, preciosa.

Me dio un beso en la mejilla, y se fue a sentar.

-_______, cielo. ¿Has ido alguna vez a un casting? – me preguntó Blair.

-No, la verdad es que no – me senté a su lado y cogí una tostada - ¿Qué se hace?

-Normalmente, te hacen preguntas sobre si has sido alguna vez modelo, y influye mucho la primera impresión– Me miro sonriendo – debes mostrar una buena actitud, y no ponerte nerviosa.

-Hecho. – contesté.

-Cuando acabes de desayunar, subimos arriba a buscar algo para ponerte. – dijo, levantándose.

-Yo también voy a ir. – dijo Justin. - ¿No te importa verdad?

Blair se paro, y le observo atentamente.

-Para nada – contestó, seca.

Cuando acabé de desayunar subí arriba. Antes me despedí de María, no la vería dentro de mucho. Tenía que ir a casa de su abuela. Ryan se fue con ella.

Subí a la habitación de Blair, ella estaba dentro del vestidor. Encima de la cama, había un montón de ropa. Vi a Blair, que salía con más conjuntos y los dejaba encima.

-En un casting de estos, siempre cuenta la primera impresión, créeme – dijo, al ver mi cara de sorpresa - Pruébate todo esto, y después elegimos.

-¿A caso se fijan tanto en la imagen? – pregunté, sabiendo ya la respuesta.

-En el mundo de la moda, es lo primero que miran – dijo, dejando unos zapatos en el suelo – después se fijan, si tienes estilo al vestir. Luego va la personalidad.

Me probé unos 10 conjuntos. Entre vestidos, camisetas, blusas, pantalones, shorts… Me maree y todo. Todo me encantaba. La ropa de Blair era perfecta y porque no decirlo, muy cara.

Me vestí con lo que más le gusto a Blair (http://www.polyvore.com/trorororororrorlololroor/set?id=42268501&.locale=es ) Ella me dio los accesorios, me peino y maquillo. Después se arreglo ella. Antes de salir, me paro.

-Escucha _______ - dijo, seria – Siento mucho haberme comportado mal contigo. ¿Crees que podremos ser amigas?

-No pasa nada – dije, con una sonrisa – Nadie es perfecto. Claro que lo podemos ser.

Blair me abrazo, y yo le devolví el abrazo. Me había pedido disculpas, y yo se las aceptaba. Todos nos equivocamos y ella lo hizo.

-Vamos – dijo, bajando las escaleras – debemos llegar pronto.

Baje las escaleras, y busqué a Justin. Estaba en el sofá, esperándonos. Al verme, sonrió.

-Si no te cogen, es que necesitan gafas – dijo, acercándose a mí.

-Gracias – susurré.

Salimos a fuera. Había un coche aparcado en la entrada. Blair se dirigió a él, y abrió la puerta.

-Vamos! Que llegaremos tarde.

Entré junto a Justin en el asiento trasero, Blair se sentó delante. Una mujer, de edad media era quien conducía.

-Esta es mi madre – dijo, Blair. – mamá, esta es _______. A Justin ya lo conoces.

La señora me dedico una simple sonrisa como saludo, y arranco. Al escuchar el sonido del motor, me puse más nerviosa aun. Era la primera vez, que iba a un casting. Justin lo noto y me cogió la mano. Me dedico una sonrisa y yo apoye la cabeza en su hombro. Me relajaba tenerle a mi lado, era fundamental para mí. Íbamos en silencio, cuando mi móvil vibro. Lo saqué del bolso, era un mensaje de mi madre:

“Cielo, siento contestarte ahora. Me alegro por ti, espero que lo consigas. Hagas lo que hagas, yo te apoyaré. Recuérdalo. Mucha suerte. “

Gracias a eso, me tranquilice aun más.

-Ya hemos llegado – dijo, Blair. – Gracias mamá.

Salí del coche de la mano de Justin, y observé el edificio. Era bonito por fuera. El típico edificio de oficinas. Entramos a dentro y Blair se dirigió al mostrador. Habló con la recepcionista, la cual le dio unas indicaciones. Cuando terminaron la conversación, Blair nos hizo un gesto con la cabeza para que la siguiéramos.

Subimos en ascensor en silencio. Llegamos a la planta número 18, y vimos un cartel donde ponía “CASTING”. No había nadie, estábamos solos.

-¿Somos las primeras? – pregunté, mirando las butacas vacías.

-Mejor. – contestó Blair, sentándose – Escúchame _______. Sobre todo no te pongas nerviosa, contesta sin miedo. Y muéstrate como eres.

Una chica de unos 20 años, salió de la sala.

-¿Venís al casting? – preguntó, mirándonos.

-Sí, ella – contestó Blair.

-Ya puedes entrar – dijo la chica, volviendo dentro la sala.

-Suerte – dijo Blair, al darme un abrazo.

Mire a Justin, el cual sonreía.

-Estoy seguro de que te van a coger – se acerco a mí, y me abrazo – Mucha suerte.

Le di un beso en forma de gratitud, y entre dentro. Si tenía suerte, estaba a punto de cumplir mi sueño.

*1 hora más tarde.*

Salí de la sala con los ánimos por el suelo.

“Gracias por venir, ya la llamaremos”

Todos sabemos que significa eso. Fui hacia Justin, y le abracé. Quería llorar, pero no delante de ellos. Era estúpido que hubiese llegado a pensar que podrían cogerme.

-No pasa nada ________ - me tranquilizo Blair – no te han dicho que no.

Asentí con la cabeza. Quería irme a casa. La madre de Blair nos paso a buscar, y nos llevo a Justin y a mí, a nuestras casas. Blair me dio su número de teléfono, por si quería hablar con ella. En realidad, no tenía nada que hablar.

-Te devolveré la ropa – dije, antes de salir – Gracias por traerme, señora Waldorf.

-Tranquila, cuando puedas.

Salí del coche, y su madre arrancó hasta que las perdimos de vista.
Justin me beso, y me dijo que me llamaría. No quería hablar con nadie, pero a él no le podía decir que no.

Entré a casa, mi madre estaba allí. Le expliqué todo lo que me hicieron en el casting, las preguntas que me hicieron. Me dijo que no me preocupaba. Que la agencia tenía mi número, y que no me habían dado un no rotundo. Aun así, no me sentía mejor. Por la noche me llamo Justin. Le conté que Blair me había pedido disculpas, y él me dijo que también se las pidió a él. No hablé mucho rato con él, tan solo una media hora. Me fui a dormir, esperando que la mañana siguiente fuera mejor.


*Una semana después*

Después de lo del casting, no tenía muchas ganas de salir. Así que me pase toda la semana con mi madre. Era con ella, con quien tenía que pasar el verano. Vi a Justin una vez durante esa semana, pero el también estaba bastante ocupado.

-________, cielo. Hoy es viernes – dijo mi madre, al acabar de desayunar - ¿Por qué no quedas con tus amigos? Ya has pasado una semana conmigo, puedes divertirte también.

-Supongo que hoy quedaré con ellos. – le sonreí.

Subí a mi cuarto, para ordenar mis cosas. Echaba de menos a María y sus tonterías. Incluso a Ryan.

Decidí llamar a María, y pedirle quedar. Cuando iba a marcar su número, una llamada entrante me sorprendió. Era un número que desconocía.

-¿________ ? ¿_________ (_apellido_)? – era una voz femenina.

-Si soy yo – contesté, confusa - ¿Quién es?

-Nos interesaría contractarla como modelo en nuestra empresa – la mujer sonaba alegre – Soy Lucy Jeffires.

Al escuchar su nombre, casi se me cae el móvil al suelo.

-¿L..Lucy J..Jeffries? – Tartamudeé

-En efecto, nos gustaría que usted pasara junto a su representante legal o pariente a nuestras oficinas de su ciudad.

-¿Qué día?

-¿Le va bien mañana?

-Perfecto – intente sonar segura de mi misma.

La mujer colgó, y yo empecé a saltar y gritar. Escuché unos pasos ajetreados. Mi madre subió las escaleras corriendo, asustada. Abrió la puerta de golpe, y me encontró bailando.

-¿¡Que pasa!? – Dijo, alborotada - ¿Qué son estos gritos?

-Mama – paré de saltar – Hollister, me quiere como modelo.



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